Ada Lovelace, nacida como Augusta Ada Byron el 10 de diciembre de 1815 en Londres, fue una matemática y escritora británica reconocida como la primera programadora de la historia. Hija del poeta Lord Byron y de Anne Isabella Milbanke, una mujer con gran interés por las matemáticas, Ada fue educada rigurosamente en ciencias desde muy joven, algo inusual para una mujer de su época.
Su vida cambió al conocer al matemático Charles Babbage, inventor de la máquina analítica, un prototipo temprano de computadora mecánica. Fascinada por el proyecto, Ada colaboró estrechamente con Babbage y en 1843 tradujo un artículo del ingeniero italiano Luigi Menabrea sobre la máquina. A esta traducción le añadió extensas notas personales, que triplicaban el texto original. En ellas incluyó un algoritmo diseñado para ser procesado por la máquina, considerado el primer programa informático del mundo.
Pero su visión fue aún más allá: Ada intuyó que las máquinas podrían manipular no solo números, sino también símbolos y música, anticipando el concepto de computación moderna. Su enfoque combinaba lógica y creatividad, lo que la llevó a describirse como una "científica poética".
Ada murió prematuramente a los 36 años, el 27 de noviembre de 1852, a causa de un cáncer uterino. Durante mucho tiempo su trabajo fue ignorado, pero con el auge de la informática en el siglo XX, su legado cobró valor y fue reivindicado. Hoy es reconocida como pionera de la programación y símbolo de la participación femenina en la ciencia y la tecnología. En su honor, se celebra el “Día de Ada Lovelace” cada octubre para visibilizar a las mujeres en STEM.