Emmy Amalie Noether nació en 1882 en Erlangen, Baviera, Alemania, en una familia de origen judío. Su padre era profesor universitario y la animó a estudiar Matemáticas y Física, mientras que su madre, ama de casa, se preocupaba más por su vida social y no quería que dedicara demasiado tiempo a los estudios.
Fue la única alumna en la universidad entre casi 1000 estudiantes. Inicialmente, no se le permitía matricularse, pero terminó destacando en un grupo de hombres. Obtuvo el doctorado "cum laude" a los 25 años, con una tesis titulada “Los sistemas completos de invariantes para las formas cuadráticas ternarias.”
Tras este trabajo, colaboró con Albert Einstein y demostró dos teoremas esenciales para la teoría de la relatividad, los cuales permitieron resolver el problema de la conservación de la energía, conocidos por los físicos como los “Teoremas de Noether” y representados como E = m·c².
Su mayor contribución a la investigación matemática fue en el campo del álgebra abstracta, siendo considerada la madre del álgebra moderna. Desarrolló la teoría algebraica de anillos, módulos, ideales, grupos con operadores, entre otros, y sus nombres quedaron asociados a los anillos noetherianos y grupos noetherianos.
A pesar de su gran talento, pasó años dando clases sin salario solo por el hecho de ser mujer. El renombrado matemático alemán, el profesor David Hilbert, intentó que se reconociera su labor y que consiguiera un puesto en la Universidad de Gotinga. Sin embargo, se consideraba que “las mujeres podrían derrumbar todo el orden académico”.
Fue la primera mujer en hablar en el Congreso Internacional de Matemáticas en Zurich, en 1932, y sus trabajos ya eran reconocidos mundialmente. Nunca tuvo mucho interés en publicar y siempre permitió que sus colegas y estudiantes desarrollaran resultados interesantes a partir de sus sugerencias, lo cual le resultaba muy gratificante.
Debido a su origen judío, tuvo que emigrar a los Estados Unidos después de que Hitler subiera al poder, donde falleció en 1935 a los 53 años. Tras su muerte, Einstein escribió una carta al New York Times, en la que afirmó: “La señora Noether fue el genio matemático creativo más importante que haya existido desde que comenzó la educación superior para las mujeres”.