Flora de Pablo Dávila nació en Salamanca, España, el 25 de febrero de 1952. Desde pequeña, le gustaba aprender y descubrir cosas nuevas. Cuando creció, decidió estudiar Medicina en la Universidad de Salamanca, donde se licenció en 1975. Además, también estudió Psicología, porque le interesaba entender cómo piensan y sienten las personas.
Después de terminar sus estudios, Flora empezó a trabajar en un hospital en Salamanca, donde aprendió mucho sobre el cuerpo humano y las enfermedades. Pero ella quería seguir investigando y aprendiendo más, así que en los años siguientes viajó a Estados Unidos, un país muy avanzado en ciencia y medicina. Allí, trabajó en importantes instituciones como los National Institutes of Health y el Instituto de Tecnología de California. Durante esos años, Flora hizo investigaciones muy importantes sobre cómo funcionan las células del cuerpo y cómo se desarrollan los órganos en los seres vivos.
En 1991, Flora volvió a España y empezó a trabajar en un centro de investigación llamado CSIC en Madrid. Ella se dedicó a estudiar cómo crecen y se desarrollan las células en nuestro cuerpo, especialmente en el cerebro y en el sistema nervioso. Su trabajo ayuda a entender enfermedades como el Alzheimer, que afecta a muchas personas mayores. Además, Flora siempre ha estado muy preocupada por que las mujeres tengan más reconocimiento en la ciencia y la tecnología, y fue una de las fundadoras de una asociación para apoyar a las mujeres investigadoras en España.
A lo largo de su vida, Flora ha recibido muchos premios por su trabajo y por su lucha por la igualdad. También ha sido directora del Instituto de Salud Carlos III y ha trabajado para que más mujeres puedan dedicarse a la ciencia. En 2007, fundó una empresa para buscar nuevas terapias para tratar enfermedades, aunque no pudo seguir adelante por falta de dinero.
En resumen, Flora de Pablo es una científica española que ha dedicado su vida a entender cómo funcionan las células y el desarrollo del cuerpo humano. Gracias a su trabajo, podemos aprender más sobre enfermedades y buscar soluciones para mejorar la salud de las personas. Además, ha sido una gran defensora de las mujeres en la ciencia, luchando por un mundo más justo y equitativo.