FRANÇAIS BARRÉ-SINOUSSI

Centro Educativo:
Colegio San Cristóbal

Principales hitos

NO HACEMOS CIENCIA POR HACER CIENCIA, HACEMOS CIENCIA PARA HACER EL BIEN DE LA HUMANIDAD

Biografía de FRANÇAIS BARRÉ-SINOUSSI

Nacida en París en 1947, su interés por la naturaleza surgió en sus vacaciones infantiles en Auvernia. Pensó estudiar medicina pero finalmente estudió ciencias para no ser una carga para su familia durante demasiado tiempo. Realizó sutesis doctoral bajo la supervisión del profesor Jean-Claude Chermann, en cuyo laboratorio del Instituto Pasteur había comenzado a trabajar durante la licenciatura estudiando la relación entre retrovirus y cáncer. Presentó la tesis en 1974 y, tras un año en el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos de Bethesda, volvió al Instituto Pasteur de París. Cuando a finales de 1982 se diagnosticaron en un hospital de París los primeros pacientes de una misteriosa enfermedad contagiosa que no respondía a ningún tratamiento conocido, le encargaron la coordinación del equipo que había de investigar si el agente infeccioso era un virus.Para valorar la trascendencia de la tarea encomendada a Françoise Barré-Sinoussi, hay que recordar la conmoción que causó en el mundo la aparición de una enfermedad que anula el sistema inmunológico, llamada Síndrome de Inmuno Deficiencia Adquirida, “SIDA” y hacía que el organismo sucumbiera a infecciones oportunistas por hongos, bacterias u otros agentes patógenos, que eran inocuos en condiciones normales.Se le llamó «la peste rosa» porque afectaba fundamentalmente a homosexuales, especialmente a los más promiscuos.Hizo cundir el pánico desatando una homofobia atroz y una ola de puritanismo. A pesar del éxito obtenido la doctora Barré-Sinoussi no ha dejado de luchar contra el SIDA. Por un lado, como directora de la unidad de Retrovirus del Instituto Pasteur, sigue investigando para descifrar los misterios que aún entraña el virus VIH, intentando encontrar una curación definitiva y una vacuna. Por otro lado, comprometida con la recuperación de los enfermos de SIDA, visita regularmente el África subsahariana, donde se encuentra la mayor parte de los 33 millones de afectados, para establecer estrategias eficaces de lucha contra la enfermedad.