Hildegarda de Bingen

Centro Educativo:
Colegio Trueba de Artxanda

Principales hitos

“Yo soy la vida ardiente de la esencia de Dios; soy la llama que domina la belleza de los campos; brillo en las aguas; ardo en el sol, la luna y las estrellas. Y con el viento del aire, avivó todas las cosas vitalmente mediante una vida invisible que todo lo sustenta”. Hildegarda de Bingen

Biografía de Hildegarda de Bingen

Hildegarda de Bingen nació en 1098 en Alemania. Hildegarda venía de una familia de clase alta y era la menor de 10 hermanos. Sus padres eran Hildebert of Bermersheim y Mechtild-Nahet.

A sus 3 años comenzó a enfermarse muy a menudo, se quejaba de dolores de cabeza y visiones. A los siete años la ingresaron como novicia en el convento de Disibodenberg.

La abadesa Jutta von Sponheim se ocupó de Hildegarda durante su infancia, aunque Jutta solo era seis años mayor que ella. Ellas se hicieron muy amigas, Jutta le enseñó a leer y a escribir junto con muchas cosas más. Durante su estancia en el convento, Hildegarda conoció un monje llamado Volmar, animó y apoyó a Hildegarda y gracias a eso ella empezó a escribir y contar sus visiones haciendo que perdiese el miedo en ellas.

Tras 7 años de servicios, a la edad de 14 años Hildegarda hizo su profesión de fe y fue aceptada en la orden. Hildegarda y Jutta eran las típicas monjas, ya que las dos provenían del mismo tipo de religión, una muy común en esa época.

Hildegarda estuvo en ese convento la mayor parte de su juventud hasta que en 1136, cuando Hildegarda tenía 38 años, Jutta la gran amiga de Hildegarda, murió. La iglesia la eligió para sustituirla. Aunque Hildegarda estaba triste por la muerte de su amiga, no podía perder esa oportunidad, así que cogió su puesto.

Hildegarda seguía teniendo miedo a sus visiones, pero Abad, Kuno y Volmar la ayudaron, así perdiendo el miedo total, de ahí nació el cuadro “El coro de los ángeles” aunque tuviese otras 33 obras, esta fue la más conocida.

En 1147, Hildegarda pidió el permiso para fundar su propio convento en Rupertsberg 105 km al sureste. Al Abad Kuno no le parecía buena idea, ya que le interesaban las visiones de Hildegarda, pero al final acabó aceptando, lo fundó en el año 1150.

En ese mismo convento, práctico la fórmula que ahora se conoce como “curación holística”, también creó un libro que se llama “Liber divinorum” un libro sobre creencias.

Murió siendo una santa abadesa benedictina y política alemana, escritora, compositora, filósofa, científica, naturalista, médica y mística con 81 años el 17 de septiembre de 1171.