Julia Robinson fue una matemática estadounidense clave en la resolución del Décimo Problema de Hilbert. Nació en 1919 y, tras una infancia con problemas de salud, encontró su pasión en las matemáticas. Se especializó en teoría de números y lógica matemática, trabajando en ecuaciones diofánticas. Fue la primera mujer elegida para la Academia Nacional de Ciencias en Matemáticas. Su colaboración con Martin Davis y Yuri Matiyasevich ayudó a demostrar que el Décimo Problema de Hilbert no tenía solución general. A pesar de los obstáculos por ser mujer en un campo dominado por hombres, dejó una huella imborrable en la historia matemática.
En 1936 comenzó sus estudios universitarios en la Universidad Estatal de San Diego y posteriormente, en 1939, la Universidad de California en Berkeley. En 1941 ya era profesora asistente en aquella universidad y tuvo que abandonar su puesto al coincidir en el mismo departamento con su marido.
A finales de 1942, Julia asistió a un seminario impartido por Alfred Tarski en el que el matemático planteó un problema que Julia le llevó resuelto dos días más tarde. Tarski le propuso realizar la tesis doctoral bajo su dirección, tesis que presentó en 1948 bajo el título de "Definability and Decision Problems in Arithmetic ".
Tras terminar su tesis, Julia se interesó por el décimo problema de Hilbert que se planteaba así: "¿Existe un método que permita determinar, en un número finito de pasos, si una ecuación diofántica es resoluble en números enteros?". Una ecuación diofántica es una ecuación algebraica con coeficientes enteros y de la que se buscan soluciones enteras. El décimo problema de Hilbert preguntaba si había algún procedimiento que nos indicase si una ecuación diofántica cualquiera tiene o no soluciones como existe en el caso de la ecuación de segundo grado.
Julia, trabajando conjuntamente con el matemático ruso Yuri Matiyasevich descubrieron que en el caso de las ecuaciones diofánticas no existe un método que se pueda usar siempre y que indique si la ecuación tiene o no soluciones enteras.
Tristemente Julia murió de leucemia a los 65 años.