Katherine Coleman Goble nació el 26 de agosto de 1918 en White Sulphur Springs, Virginia occidental.
Desde pequeña, mostró un talento excepcional para las matemáticas. Fue una física, científica espacial y
matemática estadounidense, que contribuyó a la aeronáutica de Estados Unidos y sus programas
espaciales.Se graduó a la temprana edad de 14 años y con 15 años continuó sus estudios superiores en
la denominada West Virginia State College, donde consiguió sus grados en Matemáticas y Francés a la
edad de 18 años. Durante sus años de estudio tuvo el apoyo de varios profesores, entre ellos la química
y matemática Angie Turner King y el matemático W.W. Schiefflin Claytor, el tercer afroamericano en
obtener un doctorado en Estados Unidos. El profesor Claytor vio semejante potencial en Katherine que
creó asignaturas de geometría analítica y aeronáutica específicamente para ella. En 1937 la (casi) única
opción de una mujer afroamericana para trabajar fuera de casa era dedicarse a la enseñanza. Fue así
como Katherine se mudó a Marion (Virginia) a ejercer como profesora de matemáticas, música y francés.
Según sus propias palabras, fue en Virginia donde sufrió las consecuencias de la segregación racial y el
racismo por primera vez de forma consciente.
Johnson comenzó a trabajar para la NASA en 1953, cuando comenzó a trabajar como "computadora humana" en la sede de la NASA en
Langley, Virginia. Como experta en matemáticas y geometría, realizaba todas las operaciones que
necesitaban los ingenieros aeronáuticos. Poco a poco comenzó a conocer el trabajo que hacían,
a hacer preguntas y pedir permiso para asistir a sus reuniones. No pasó mucho tiempo
hasta que empezó a pensar y proponer alternativas. Fue una de las primeras mujeres
negras en desempeñar un papel clave dentro de la NASA. Sus contribuciones incluyeron cálculos fundamentales para las primeras
misiones espaciales, incluida la misión orbital de John Glenn en 1962.
Más adelante, en 1969, cuando los astronautas de la Apolo 11 Neil Armstrong, Buzz Aldrin y Michael Collins pusieron rumbo a la Luna, lo
hicieron usando las matemáticas de Johnson. «Computé la trayectoria que os llevaría allí», recordó Johnson en su entrevista
con MAKERS. En 2015, el presidente Barack Obama le otorgó la Medalla Presidencial de la Libertad, la máxima condecoración civil en
los Estados Unidos. Un año después el astronauta de la NASA Leland D. Melvin le concedió el Premio Silver Snoopy y un Premio al Logro del
Grupo de la NASA.
Durante 2019 recibió la Medalla de Oro del Congreso por parte del Congreso de los Estados Unidos. En 2021, fue incluida de manera
póstuma en el Salón Nacional de la Fama de la Mujer.