Margaret Hamilton

Centro Educativo:
IES Ramón Giraldo

Principales hitos

“There was no choice but to be pioneers.”

Biografía de Margaret Hamilton

Margaret Heafield Hamilton nació el 17 de agosto de 1936 en Paoli, Indiana, Estados Unidos. Es una matemática, científica computacional e ingeniera de sistemas reconocida por su papel fundamental en el desarrollo del software de navegación del programa Apolo de la NASA, que permitió a la humanidad llegar a la Luna por primera vez en 1969.

Graduada en Matemáticas por el Earlham College en 1958, Hamilton inició su carrera profesional en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), donde inicialmente trabajó en meteorología y posteriormente se incorporó al Proyecto Apolo en el Laboratorio de Instrumentación del MIT. En un momento en que la programación era una disciplina emergente y predominantemente masculina, Margaret no solo sobresalió, sino que definió estándares que hoy se consideran fundamentales.

Como directora de la División de Ingeniería de Software del MIT para el proyecto Apolo, Hamilton fue responsable del desarrollo del software a bordo del Apolo 11. Su trabajo resultó esencial durante el alunizaje, cuando una sobrecarga de datos activó las alarmas del sistema. Gracias al diseño robusto del software, la misión pudo continuar sin interrupciones, lo que permitió a Neil Armstrong y Buzz Aldrin pisar la superficie lunar.

Hamilton fue una de las primeras personas en utilizar el término “ingeniería de software”, y luchó por que esta área fuera reconocida con el mismo respeto que la ingeniería tradicional. Su enfoque riguroso en la depuración, la fiabilidad y la anticipación de errores fue revolucionario y sentó las bases de la ingeniería moderna de software.

A lo largo de su carrera, fundó varias compañías, incluida Hamilton Technologies, y ha sido galardonada con múltiples reconocimientos, entre ellos la Medalla Presidencial de la Libertad en 2016, otorgada por el presidente Barack Obama.

Margaret Hamilton es un símbolo de innovación, liderazgo y perseverancia. Su legado no solo está en el código que ayudó a llevar al hombre a la Luna, sino también en el camino que abrió para generaciones de mujeres en la ciencia y la tecnología.