Margarita Salas (1938-2019) fue una destacada bioquímica y una de las científicas más importantes de España. Nació en Canero, Asturias, y se graduó en Ciencias Químicas por la Universidad de Oviedo. En 1963, se trasladó a Estados Unidos para trabajar con el reconocido científico Severo Ochoa en la Universidad de Nueva York, donde desarrolló su pasión por la biología molecular. Su investigación más relevante fue el descubrimiento de la ADN polimerasa del virus Phi29, una enzima fundamental para la amplificación del ADN, que se utiliza ampliamente en biotecnología, medicina forense y genética. Esta labor revolucionó las técnicas de clonación y amplificación genética, posicionándola como una pionera en su campo. Su trabajo en el laboratorio de Ochoa y su posterior investigación en España sentaron las bases para muchas investigaciones científicas en el país. Salas también fue una de las figuras clave en la introducción de la biología molecular en España, formando a numerosas generaciones de científicos. A lo largo de su carrera, ocupó varios cargos importantes, siendo profesora titular en la Universidad Autónoma de
Madrid, donde lideró proyectos de investigación. En 2003, fue la primera mujer elegida para la Real Academia de Ciencias de España, un logro histórico que rompió barreras de género en el ámbito académico y científico.
Su legado continúa siendo una fuente de inspiración para mujeres en ciencia y tecnología. A lo largo de su carrera, recibió múltiples premios y honores, y su trabajo sigue siendo esencial para el avance de la biotecnología moderna.