María Blasco

Centro Educativo:
IES Guadiana

Principales hitos

La ciencia es la mejor herramienta que tenemos para mejorar nuestra vida y nuestro futuro.

Biografía de María Blasco

María Blasco Marhuenda, nacida en 1965 en Alicante, es una figura emblemática en el mundo de la biología molecular y la investigación oncológica, reconocida tanto en España como a nivel internacional. Desde muy temprana edad, Blasco mostró una curiosidad insaciable por la ciencia, lo que la llevó a estudiar Biología en la Universidad de Valencia. Durante sus años universitarios, destacó por su dedicación y pasión, lo que la impulsó a profundizar en temas de genética y biología celular, sentando así las bases de una carrera científica que revolucionaría el entendimiento de procesos fundamentales de la vida.
Su brillante trayectoria académica la condujo al Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, donde realizó su doctorado bajo la tutela de la reconocida científica Margarita Salas. En este entorno, se consolidó su interés en el estudio de los telómeros y la telomerasa, elementos esenciales para la protección de los cromosomas y cruciales en el proceso de envejecimiento celular y en la génesis del cáncer. La rigurosidad y el compromiso demostrados durante esta etapa abrieron la puerta a oportunidades internacionales.
Blasco amplió sus horizontes trabajando en el laboratorio del Nobel Carol Greider en el Cold Spring Harbor Laboratory, en Estados Unidos. Durante esta etapa, profundizó en el papel de la telomerasa, familiarizándose con técnicas de vanguardia que le permitieron desarrollar enfoques innovadores y sentar las bases para futuros avances en la investigación del envejecimiento y la oncología. Esta experiencia no solo le valió el reconocimiento internacional, sino que también reforzó su convicción de que la ciencia podía ofrecer soluciones a problemas biológicos fundamentales.
A su regreso a España, María Blasco se integró al Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), donde su carrera alcanzó nuevos hitos. En 2011, fue nombrada directora del CNIO, cargo desde el cual ha impulsado proyectos pioneros y fomentado la colaboración entre diversas instituciones científicas y universidades. Bajo su liderazgo, el CNIO se ha posicionado como un referente mundial en la investigación del cáncer y en el estudio de la telomerasa, abriendo la puerta a terapias regenerativas y estrategias innovadoras para combatir enfermedades degenerativas.
La influencia de Blasco trasciende el laboratorio: es una ferviente defensora de la inversión en ciencia y de la igualdad de género en el ámbito académico. Su compromiso con la excelencia científica se refleja en los numerosos artículos publicados en revistas de alto impacto y en los múltiples premios y distinciones que ha recibido a lo largo de su carrera. Además, ha servido de inspiración para nuevas generaciones de investigadores, demostrando que la perseverancia y la pasión pueden transformar la ciencia y, por ende, la sociedad.