Rita levi-Montalcini

Centro Educativo:
IES Ramón Giraldo

Principales hitos

El cuerpo se me arruga es inevitable pero no el cerebro

Biografía de Rita levi-Montalcini

Rita Levi-Montalcini (22 de abril de 1909 – 30 de diciembre de 2012) fue una destacada neuróloga y científica italiana, galardonada con el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 1986. Su vida y carrera fueron testimonio de determinación, pasión por la ciencia y compromiso con el conocimiento, incluso frente a la adversidad.

Nacida en Turín, Italia, en el seno de una familia judía, desde joven mostró interés por el conocimiento, aunque su padre, un ingeniero y matemático, inicialmente se oponía a que ella estudiara. A pesar de esto, Rita ingresó a la Universidad de Turín, donde estudió medicina y se especializó en neurología y psiquiatría. Durante sus estudios fue influenciada por el histólogo Giuseppe Levi, quien despertó su interés por la investigación.

Durante la Segunda Guerra Mundial, las leyes antisemitas del régimen fascista de Mussolini le impidieron ejercer oficialmente, pero Rita no se rindió. Instaló un laboratorio improvisado en su casa, donde continuó sus investigaciones, incluso en condiciones precarias. Este periodo fue clave en el inicio de sus estudios sobre el desarrollo del sistema nervioso.

Tras la guerra, fue invitada por el científico Viktor Hamburger a trabajar en la Universidad de Washington en St. Louis, Estados Unidos. Allí realizó su descubrimiento más importante: el Factor de Crecimiento Nervioso (NGF, por sus siglas en inglés), una proteína fundamental para el crecimiento, mantenimiento y supervivencia de las neuronas. Por este hallazgo compartió el Nobel en 1986 con Stanley Cohen.

Además de su carrera científica, Levi-Montalcini se convirtió en un símbolo de la lucha por los derechos humanos, la educación y el papel de la mujer en la ciencia. Fue senadora vitalicia del Senado italiano desde 2001, y trabajó activamente hasta una edad muy avanzada, incluso después de cumplir los 100 años.

Rita Levi-Montalcini falleció a los 103 años, dejando un legado inmenso no solo en la ciencia, sino también como figura inspiradora que desafió barreras culturales, sociales y políticas.