RITA LEVI-MONTALCINI
Rita Levi-Montalcini nació el 22 de abril de 1909 en Turín, Italia, en una familia judía de clase media. Desde pequeña, mostró un gran interés por la ciencia, especialmente por la biología, aunque su familia esperaba que se dedicara a las artes. Su padre, un ingeniero, apoyaba su interés por la ciencia, pero su madre, que era más conservadora, se oponía a que siguiera una carrera en ese campo. A pesar de estas dificultades, Rita perseveró y se graduó en Medicina por la Universidad de Turín en 1936.
En su juventud, Montalcini se enfrentó a la discriminación por ser mujer y judía, pero eso no detuvo su pasión por la investigación. Durante la Segunda Guerra Mundial, después de la promulgación de las leyes raciales en Italia que le prohibían trabajar en instituciones académicas, Rita se trasladó a Bruselas y montó un pequeño laboratorio en su habitación. Fue allí donde realizó su mayor hallazgo: el descubrimiento del factor de crecimiento nervioso (NGF, por sus siglas en inglés), lo que revolucionó el campo de la neurociencia. Este hallazgo fue fundamental para entender cómo las células nerviosas se desarrollan y cómo las neuronas se comunican.
A lo largo de su vejez, Rita Levi-Montalcini siguió trabajando y mantuvo su pasión por la ciencia. A los 87 años, recibió el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 1986, que compartió con Stanley Cohen, por su descubrimiento del NGF. A pesar de su avanzada edad, continuó colaborando con investigadores hasta sus últimos días. Además, fundó en 2001 la Fundación Rita Levi-Montalcini, dedicada a promover la educación y el desarrollo en países en vías de desarrollo.
Tres hechos destacados de su vida:
1. Descubrimiento del Factor de Crecimiento Nervioso (NGF): En 1952, descubrió el NGF, una proteína que promueve el crecimiento y la supervivencia de las células nerviosas, un hallazgo crucial para el estudio de enfermedades neurológicas como el Alzheimer.
2. Premio Nobel de Medicina (1986): Junto con Stanley Cohen, recibió el Premio Nobel de Fisiología o Medicina por su trabajo sobre el factor de crecimiento nervioso.
3. Activismo por la Educación y los Derechos de la Mujer: A lo largo de su vida, Montalcini fue una defensora de la educación, especialmente para las mujeres, y luchó por la igualdad de género en la ciencia.
• Frase célebre: "Lo más importante es nunca dejar de hacerse preguntas. La curiosidad tiene su propia razón de existir."
• Esta frase refleja la actitud constante de Montalcini frente a la vida y la ciencia, subrayando la importancia de la curiosidad y el deseo de aprender, cualidades que la acompañaron a lo largo de toda su vida.