Sophie Germain

Centro Educativo:
I.E.S. La Pedrera blanca

Principales hitos

“El humor trae conocimiento y tolerancia, la ironía aporta una comprensión más profunda y menos amigable”

Biografía de Sophie Germain

Sophie de Germain fue una matemática del siglo XVIII que vivió en París. A pesar de
los problemas que en ese siglo suponía ser matemática y mujer a la vez, ella
consiguió llegar muy lejos en dos campos: la Teoría de Números y la Teoría de la
Elasticidad. Se rodeó de matemáticos tan importantes como Gauss, a quien
solamente conoció por correo. Su trabajo llamó la atención del matemático
Joseph-Louis Lagrange, quien, al descubrir su verdadera identidad, quedó tan
impresionado que comenzó a apoyarla públicamente. Durante mucho tiempo se hizo
pasar por Antoine-Auguste Le Blanc para no tener problemas por ser una mujer, no
pudo vivir de una carrera profesional como matemática, pero aún así, trabajó de
manera independiente durante toda su vida. En 1811 Germain participó en un
concurso de la Academia Francesa de las Ciencias para explicar los fundamentos
matemáticos desarrollados por un matemático alemán, Ernst Chladni, aplicados al
estudio sobre las vibraciones de las superficies elásticas. Después de ser rechazada
por dos veces, en 1816 ganó el concurso, con el trabajo que tenía por título “Mémoire
sur les Vibrations des Surfaces Élastiques”. Esto le permitió convertirse en la primera
mujer que asistió a las sesiones de la Academia Francesa de las Ciencias (aparte de
las esposas de los miembros) y la colocó junto a los grandes matemáticos de la

historia. Se infiltró en la École Polytechnique, una prestigiosa escuela de
matemáticas y ciencias en Francia, sin ser estudiante ni tener permiso oficial. Lo
sorprendente es que aprendió toda la física por sí misma, sin un maestro formal ni
acceso a laboratorios. Ella consiguió apuntes y materiales de estudio en secreto y
empezó a enviar soluciones a los problemas asignados en las clases, haciéndose pasar
por un estudiante varón. Sophie Germain fue realmente única, no solo por su
inteligencia sino por su determinación para desafiar un sistema que la excluía.
Su vida matemática: El teorema de Sophie Germain demuestra que si n es un
número primo tal que 2n+1 es primo, entonces el primer caso del teorema de Fermat
es verdadero. El trabajo se había simplificado a la mitad. El teorema de Germain será
el resultado más importante relacionado con la conjetura de Fermat desde 1738
hasta la obra de Ernst Eduard Kummer en 1840. Posteriormente, hacia 1819, Sophie
retomó sus trabajos en teoría de números. De esta época es otro de los resultados de
Sophie. Descubrir las ecuaciones diferenciales de las superficies vibrantes parecía
demasiado difícil a los ojos de la mayor parte de los matemáticos. A pesar de las
lagunas de su formación, o quizás por ello, Sophie fue la única concursante. Lo tomó
como un reto, y el 21 de septiembre de 1811 presentó una memoria a la Academia,
pero su trabajo fue considerado incompleto e incorrecto, y el jurado decidió posponer
dos años más el premio. De este trabajo sólo se conoce la ecuación final en una nota
de ocho líneas.